Batería física vs. batería virtual: principales diferencias

Escrito por Maria Florencia Moreno, Gestora Energética en Samara.
Si quieres optimizar el uso de tu sistema de energía solar y reducir al máximo tu factura eléctrica, es fundamental conocer las mejores estrategias para aprovechar los excedentes generados por tus paneles solares.
Las baterías físicas son una solución ideal para almacenar energía y utilizarla en el momento que más te convenga. Además, combinarlas con la venta de excedentes a través de una batería virtual te permite maximizar el retorno de tu inversión.
En este artículo, te explicamos cómo funcionan las baterías físicas y cómo puedes sacarles el máximo provecho.
Una batería física almacena directamente la energía generada por los paneles solares, permitiendo su uso posterior y aumentando tu autonomía energética.
Almacenamiento de energía solar
Durante el día, los paneles solares convierten la luz del sol en electricidad. Esta energía se usa en tiempo real para alimentar tus electrodomésticos, luces y otros dispositivos. Si tus paneles solares producen más energía de la que necesitas en ese momento, el excedente se almacena en la batería física.
Por ejemplo, si generas 10 kWh y solo consumes 4 kWh, los 6 kWh restantes quedan guardados para su uso posterior.
Uso de la energía acumulada
Cuando los paneles no generan energía (como durante la noche o en días nublados) puedes usar la energía almacenada en tu batería.
Esto te permite reducir la dependencia de la red eléctrica y ahorrar en la factura de la luz. Si la batería se descarga por completo, la red actúa como respaldo para garantizar el suministro de energía, por lo que nunca te quedarás sin energía en tu hogar.
La batería virtual es un servicio ofrecido por algunas comercializadoras que funciona de forma similar a la compra de excedentes, pero con una diferencia clave: en lugar de pagarte por tus excedentes, estos se "almacenan virtualmente" para que los uses más adelante.
Es como si los excedentes que generaste en un día soleado quedarán guardados para cuando los necesites, aunque realmente no se almacenen físicamente ya que no es una batería física. Cada comercializadora lo hace de manera diferente (por ejemplo, algunas establecen límites de tiempo y otras no).
¿Qué signifíca?
La combinación de una batería física con la venta de excedentes puede maximizar tus beneficios. Así es cómo funciona:
Mayor autonomía energética
Reduces tu dependencia de la red eléctrica, asegurando un suministro constante incluso en casos de interrupciones (cuando no hay energía) o alta demanda (cuando el precio es más alto).
Ahorro significativo en tu factura
Al usar la energía almacenada en lugar de depender de la red, puedes disminuir significativamente tus facturas de electricidad.
Aprovechamiento máximo de tu energía solar
Aprovecha cada kWh generado por tus paneles solares, ya sea almacenándolo o vendiéndolo a tu comercializadora.
Sostenibilidad
Contribuyes a un uso eficiente de los recursos renovables, minimizando tu impacto ambiental y promoviendo la energía limpia.
Invertir en una batería física te permite optimizar el rendimiento de tu sistema solar, reducir tu gasto eléctrico y aprovechar al máximo los excedentes energéticos.
Si buscas mayor autonomía y ahorro, integrar una batería física es una opción muy interesante. Consulta con nuestro equipo para encontrar la solución que mejor se adapte a las necesidades de tu hogar y maximiza los beneficios de tu instalación solar.